El rol del Design Thinking en la Innovación

La típica estrategia corporativa involucra un consultor o estratega interno que define un problema y una solución. Esta se presenta a la dirección y esta puede ser aprobada sin:

  • Tener claridad desde la perspectiva de los usuarios o stakeholders

  • Considerar las posibilidades o alternativas

  • Estudiar y validar los supuestos o hipótesis iniciales.

Esto sucede ya que mayormente las decisiones se toman con base en intuición y no en evidencia. Es aquí donde el Design Thinking o pensamiento de diseño entra en juego.

El Design Thinking

El Design Thinking es un enfoque de resolución de problemas que implica empatía por el usuario, creatividad en la generación de ideas y experimentación a través de la creación rápida de prototipos. Se utiliza para diseñar productos, servicios y procesos que satisfagan las necesidades de los usuarios y partes interesadas. Generalmente, el pensamiento de diseño implica comprender el problema, recopilar información, generar ideas, crear prototipos, probar, e iterar el diseño. El pensamiento de diseño es un enfoque centrado en el ser humano que fomenta la colaboración y la iteración para llegar a soluciones innovadoras

El Design Thinking es una herramienta madura desarrollada en la década de los 50 y popularizada en los 90 por la firma IDEO, al ayudar a diversas empresas a generar productos como el famoso mouse de Apple. Una vez pasada la etapa de validación, la iniciativa sigue su ciclo en el proceso de innovación para concluir el desarrollo y llevarla a la comercialización o implementación.

La clave para emplear design thinking de manera correcta

Tradicionalmente, la innovación ha sido estrechamente asociada con el diseño. Pasados los años los principios centrales del diseño se han expandido de únicamente en innovación de producto para también ser aplicado en la estrategia. Design Thinking apunta a la creación de cambios significativos en lugar de mejoras incrementales, volviéndose una herramienta eficiente para alcanzar la innovación radical.

Analizando la innovación de una manera holística, podemos pensar generar valor en tres niveles distintos:

  • Lo que sabemos que sabemos (horizonte 1)

  • Lo que sabemos que no sabemos (horizonte 2)

  • Lo que no sabemos que no sabemos (horizonte 3)

Consultar: Horizontes de Innovación

Cuando nos planteamos resolver un problema con Desing Thinking es porque ya sabemos lo que no sabemos y podemos comenzar a plantear hipótesis y experimentos para descubrir ese conocimiento oculto.

Para generar innovación de eficiencia en horizonte 1 donde ya sabemos como mejorar o evolucionar una práctica, producto o servicio, no es necesario emplear un Desing Thinking como tal. Tampoco cuando queremos explorar lo desconocido en el horizonte 3, ya que en estos casos es mejor abordar los temas con la mente en blanco y estar atentos a lo que está más allá de lo posible adyacente.

El Desing Thinking es un enfoque de resolución de problemas que implica empatía por el usuario, creatividad en la generación de ideas y experimentación a través de la creación rápida de prototipos. Se utiliza para diseñar productos, servicios y procesos que satisfagan las necesidades de los usuarios y partes interesadas. El proceso generalmente implica comprender el problema, recopilar información, generar ideas, crear prototipos y probar, e iterar el diseño. El Desing Thinking es un enfoque centrado en el ser humano que fomenta la colaboración y la iteración para llegar a soluciones innovadoras. Por lo tanto, donde el Desing Thinking encaja como anillo al dedo en la innovación de horizonte 2.

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